La pandemia de COVID-19 dejó una gran enseñanza, al menos en el plano empresarial: La inversión digital es el camino correcto. Y quienes asimilaron la lección están triunfando.

Las firmas más robustas en el ámbito digital pudieron responder a las necesidades de unos clientes confinados en sus casas durante la crisis sanitaria. Y también supieron lidiar con el trabajo a distancia.

Y ahora, para estas empresas tiene más sentido dedicar buena parte de las inversiones a tecnologías que mejores o faciliten los procesos administrativos y productivos.

Ante la evidencia, las empresas ya no tienen excusas. En los países industrializados y en vías de desarrollo la inversión digital se lleva buena parte de los recursos de la empresa, pero ¿qué pasa en el resto?

Tres claves de la inversión digital

Hay tres fundamentos clave en la inversión digital que toda empresa debe conocer, y que se mantienen vigentes en esta era poscoronavirus.

El primero es la necesidad de hacer red de negocios, que vayan más allá de la entrega del producto. Una empresa aislada, sin interacción con otras ni con el mercado no llegará a ningún lado.

Luego están los datos, que pronto ya serán procesos y, como tal, deben ser usados en pro del objetivo de la empresa. La inversión digital debe enfocarse en mejoras para la experiencia virtual y presencial.

Y finalmente la sostenibilidad, que se aprovecha de nuevos procesos tecnológicos para ser realidad hasta en los medios más difíciles o complicados.

El futuro asegurado a punta de tecnología

La gran mayoría de los directores financieros (CFO) de las empresas tiene previsto mantener o incrementar la inversión digital en su firma. Esta intención es del 78% de los encuestados por la consultora Gartner.

Se trata de la “Encuesta de Innovaciones Tecnológicas Financieras” que contestaron 199 directores financieros y altos cargos de finanzas. Lo tienen claro: la tecnología es la clave para mitigar la inflación, incluso cuando se están planeando reducciones de costos en otras áreas del negocio si la subida de los precios persiste este año.

De acuerdo al informe que publicó la consultora a raíz de la encuesta, las empresas con fuerte inversión digital tienen una retención de clientes 2,7 veces mayor, tasas de satisfacción de clientes 1,6 veces mayores y un valor medio de los pedidos 1,9 veces mayor.

La consultora también ha podido constatar a través de la encuesta que el 67% de los consumidores pagarán más por mejores experiencias digitales.