Las ventajas del trabajo híbrido apenas son notadas después de superada la crisis provocada por la pandemia. Y cada vez más empresas adoptarán este formato de trabajo, por sus propios méritos.

No había transcurrido el primer trimestre de 2020 cuando fue necesario confinar a las personas en sus casas. Evitar la propagación de la COVID-19 fue la norma en esos meses.

Mientras tanto, las empresas improvisaron fórmulas para seguir activas en el marco de una crisis sanitaria y social de envergadura.

Así se puso de moda el trabajo remoto, el teletrabajo. Pero no todas las compañías estaban preparadas para eso, por falta de tecnología o equipos. Esto provocó una aceleración de la transformación digital, que sigue adelante y que desde Innovart apoyamos con soluciones tecnológicas de calidad y a medida.

Superada la pandemia, el trabajo híbrido tomó un significado más relevante. Se entiende que algunos empleados pueden cumplir sus funciones en parte de forma remota y en parte de forma presencial.

Los beneficios del trabajo remoto

Por supuesto que la primera ventaja del trabajo híbrido es económica. La empresa reduce algunos servicios, como alquiler de espacios, ambientación y servicio de limpieza, entre otros.

Si se trata de una gran firma, que necesariamente opera en un centro urbano, puede evitar gastos para sus empleados como rentas de vivienda más costosa y traslados.

Por cierto, el ahorro en el traslado no solo es económico, sino que mejora la calidad de vida de los trabajadores, al evitar largas horas en el tráfico.

La salud de los empleados estará mejor resguardada en casos como este, y es un elemento que también tiene valor en las nuevas estructuras económicas.

Crecimiento exponencial

Por esta y otras razones el modelo de trabajo híbrido seguirá creciendo exponencialmente. Al menos es lo que observa en un estudio IWG, uno de los más grandes proveedores de espacio de trabajo flexible.

El estudio, llevado a cabo por la consultora Global Workplace Analytics, establece que la adopción del trabajo híbrido reduce significativamente los gastos fijos de una empresa.


Trabajo híbrido: preferencia de los empleados

Una encuesta de la misma IWG demostró que la mayoría de los empleados apuesta por el trabajo híbrido. Una opinión que las empresas no pueden ignorar.

Casi la mitad de los trabajadores (49%) dejarían su trabajo si se les pidiera volver a la oficina cinco días a la semana, mientras que tres cuartas partes (72%) preferirían la posibilidad de trabajar de forma flexible a largo plazo antes que volver a la oficina cinco días a la semana con un aumento de sueldo del 10%. En este contexto, la dirección empresarial debe reflexionar sobre su política de trabajo remoto o híbrido. Otorgar mayor flexibilidad, permitir a los empleados de trabajar donde lo necesiten, ya sea en casa, en el centro de la ciudad, o en una oficina local flexible sería la clave.