El debate por cómo era el rostro de Jesús se avivó recientemente debido a que un artista recreó al Mesías con ayuda de una inteligencia artificial.
Se trata del fotógrafo holandés Bas Uterwijk, quien aplicó las herramientas de hoy en día para crear el rostro de Jesús con un estilo hiperrealista.
Sin embargo, no es el primero que hace. Se ha dedicado a reconstruir a personalidades de épocas en las que no había fotografía y de las que solo hay referencias en pinturas y esculturas.
El artista y fotógrafo es por recrear imágenes del rey David, Vincent Van Gogh, Napoleón y varias figuras de los imperios egipcios, entre otros.
Así se creó la nueva versión del rostro de Jesús
Uterwijk echó mano a un software gratuito llamado Artbreeder, que con inteligencia artificial es capaz de hacer reconstrucciones hiperrealistas a partir de múltiples imágenes.
La “foto” del rostro de Jesús fue hecha para Navidad de 2022, pero es relevante en estos días de Semana Santa, cuando el mundo católico recuerda la pasión y muerte del hijo de Dios.
La tecnología usada por el artista se basa en dos redes neuronales que ‘compiten’ entre sí: una reconstruye el rostro a partir de imágenes de las que “aprendió”. Mientras que la otra analiza y cataloga qué tan realista y cercana a la realidad se ve.
“Intento guiar al software hasta un resultado creíble. Pienso en mi trabajo más como interpretaciones artísticas que como imágenes científicamente o históricamente precisas”, dijo Uterwijk.
Una imagen polémica de Jesús
La imagen hiperrealista de cómo se vería el rostro de Jesús despertó una amplia polémica. Y es que dista mucho de la versión rubia y de ojos azules a la que estamos acostumbrados de Jesucristo.
Pero tiene sus razones. El artista aplicó técnicas que se ajustaron al genotipo y raza de la época en que vivió Jesús. Además, agregó pinturas antiguas de personas que recrearon al Mesías tras visiones o revelaciones que dijeron tener del hijo de Dios.
Y aunque la hizo con inteligencia artificial, el trabajo no salió de inmediato. Le tomó un año construir este rostro de Jesús, en dos versiones: con pelo largo y con pelo corto, que sería más cercana a las costumbres sociales de la época.